El agua de Inglaterra presenta la peor contaminación en una década

Un revés importante muestran las compañías de agua en Inglaterra, en su desempeño como garantes de la calidad de ese servicio vital y en resguardo de la salud de la población. Los empresarios incumplieron ampliamente sus metas de reducción de contaminación al totalizar 2.487 incidentes en 2024, el doble del límite establecido por la Agencia de Medio Ambiente.

Las empresas tenían un objetivo de disminución del 40% en incidentes de contaminación, estipulado por el regulador ambiental, en cambio registraron un aumento del 30%. Este comportamiento desproporcionado, representa además, el número de incidentes más alto en una década.

Un nuevo informe de la organización benéfica Surfers Against Sewage revela que la industria del agua en Inglaterra no alcanzó sus objetivos de reducción de incidentes de contaminación para el último período de inversión de 2020-2025. La organización utiliza datos de vertidos, datos de enfermedades y cifras de su aplicación. Así como la colaboración ciudadana para rastrear los derrames de aguas residuales.

Este saldo adverso puede comprometer a la vida silvestre y a las personas. «La industria del agua fracasa, fracasa y vuelve a fracasar», afirmó Giles Bristow, director ejecutivo de Surfers Against Sewage.

Pidió una reforma del sistema para que «priorice la salud pública. Y la relación calidad-precio del consumidor y proporcione costas, ríos y lagos saludables».

Poco transparente el agua en Inglaterra

Los desbordamientos por tormentas derramaron aguas residuales en los ríos, lagos y costas de Inglaterra durante meses continuos.

Water UK, el organismo industrial que representa a las empresas de agua y alcantarillado del Reino Unido, dijo que las empresas planean invertir £12.000 millones ($15.000 millones) para reducir los derrames al final de la década.

«Hemos sido claros en que el sistema de agua no está funcionando. Apoyamos a la Comisión Independiente del Agua que analiza todos los aspectos de cómo se regula la industria”. Sin embargo”, señaló que “ningún derrame de aguas residuales es aceptable. Y las compañías de agua están invirtiendo para reducir casi a la mitad los derrames causados ​​por desbordes de tormentas para 2030».

Se espera que la mayor parte del dinero para esa inversión provenga de aumentos en las facturas del agua, que comenzaron a entrar en vigor este mes. El regulador de la industria Ofwat está permitiendo a las compañías de agua en Inglaterra aumentar las facturas en un promedio de £31 cada año($41) durante los próximos cinco años. Esos aumentos no incluyen la inflación y es probable que las facturas sean más altas.

El informe de Surfers Against Sewage también revela que a pesar de los fracasos en la reducción de la contaminación y las nuevas regulaciones destinadas a reducir las ganancias de los ejecutivos que presiden los derrames de aguas residuales, los accionistas recibieron £ 1. 200millones en 2023-24. Pese al número récord de horas en que se descargaron aguas residuales sin tratar.

De fracaso en fracaso

Giles Bristow indicó que la situación es alarmante. Un número récord de horas de vertidos de aguas residuales, enormes aumentos en las facturas, miles de personas enfermas y, aun así, la industria tiene el descaro de seguir pagando miles de millones de dólares de los contribuyentes a los accionistas.

«Este sistema, que no funciona, necesita una reforma urgente. En el mundo, la norma es gestionar el agua a nivel local, en lugar del modelo de propiedad 100% privada vigente en Inglaterra. Este sistema ha resultado catastrófico para el medio ambiente y la salud pública», denunció.

La organización benéfica implementa un programa de monitoreo de enfermedades para que las personas puedan reportar posibles enfermedades por contacto con agua contaminada. Los bañistas corren el riesgo de contraer bacterias, como la E. coli, si el agua en la que nadan ha sido objeto recientemente de un derrame de aguas residuales.

Solo en 2024, Surfers Against Sewage recibió 1.853 informes de enfermedades a través de su aplicación: un promedio de cinco personas enfermaban al día después de usar el agua. De ellas, 331 tuvieron que acudir al médico, y el 79 % informó que su médico había atribuido su enfermedad a la contaminación por aguas residuales. Se registraron cientos de casos de gastroenteritis e infecciones respiratorias. Así como infecciones bacterianas graves e ingresos hospitalarios.

En septiembre de 2023, Charlie Clarke, de 28 años, nadó en el lago marino de Clevedon, cerca de Bristol, mientras entrenaba para un Ironman. Al día siguiente, se desplomó mientras corría y fue trasladado al hospital. Durante los cuatro meses siguientes, múltiples pruebas concluyeron que un virus contraído mientras nadaba le había bajado la presión arterial y le había causado un problema cardíaco leve.

Control y seguimiento

Un portavoz de Water UK, la entidad del sector, consideró que “ningún vertido de aguas residuales es aceptable. Y las compañías de agua están invirtiendo 12.000 millones de libras para reducir casi a la mitad los vertidos por desbordamientos de tormentas para 2030”.

Esto forma parte de la mayor cantidad de dinero jamás invertida en el medio ambiente para impulsar el crecimiento económico, indicó. También para construir más viviendas, asegurar el suministro de agua y evitar que las aguas residuales entren en los ríos y mares.

Entretanto, un vocero de la Agencia de Medio Ambiente sostuvo que “este nivel de contaminación del agua en Inglaterra es inaceptable. Estamos tomando diversas medidas para exigir responsabilidades a las compañías de agua si contaminan nuestros ríos y vías fluviales. Ahora es un requisito legal que estas empresas elaboren planes anuales que demuestren cómo cumplirán su expectativa de reducir los incidentes de contaminación en 40%.